G Model

MEDCLI-3182; No. of Pages 5 Med Clin (Barc). 2015;xx(x):xxx–xxx

www.elsevier.es/medicinaclinica

Revisio´n

Preca´ncer y ca´ncer bucal ˜ a-Cepeda b y Enric Jane´-Salas a,* Jose´ Lo´pez-Lo´pez a, Carlos Oman a b

Departamento de Odontoestomatologı´a, Facultad de Odontologı´a, Universidad de Barcelona, l’Hospitalet de Llobregat, Barcelona, Espan˜a Ma´ster de Odontologı´a en Pacientes Oncolo´gicos e Inmunocomprometidos, Facultad de Odontologı´a, Universidad de Barcelona, l’Hospitalet de Llobregat, Barcelona, Espan˜a

´ N D E L A R T I´ C U L O INFORMACIO

R E S U M E N

Historia del artı´culo: Recibido el 8 de octubre de 2014 Aceptado el 20 de noviembre de 2014 On-line el xxx

Se revisa el concepto de lesiones precancerosas orales, de ca´ncer oral y su diagno´stico precoz. Con las ˜ os. palabras clave: premalignant oral lesions prevention se realiza una bu´squeda de los 10 u´ltimos an Tambie´n se buscan los ensayos clı´nicos desde enero de 2011 hasta la actualidad con las palabras clave: oral cancer prevention AND dentistry. Se destaca que no hay cambios significativos relacionados con el concepto de lesio´n precancerosa y ca´ncer, y que en cuanto al diagno´stico precoz, si bien se describen numerosos me´todos de cribado, la biopsia sigue siendo la prueba ma´s u´til y, por tanto, imprescindible, ma´s au´n si consideramos las nuevas posibilidades de estudios moleculares. ˜ a, S.L.U. Todos los derechos reservados. ß 2014 Elsevier Espan

Palabras clave: Ca´ncer Preca´ncer Lesiones premalignas Lesiones malignas Lesiones potencialmente malignas Liquen plano oral Leucoplasia

Oral precancer and cancer A B S T R A C T

Keywords: Cancer Precancer Pre-malignant lesions Malignant lesions Potentially malignant disorders Oral lichen planus Leukoplakia

We reviewed the concept of oral precancerous lesions, oral cancer, and the possibility of early diagnosis. With the keywords: premalignant oral lesions prevention, a search was performed over the past 10 years. Also clinical trials are searched from January 2011 until today with the keywords: oral cancer prevention AND dentistry. It is emphasized that there can be no significant changes related to the concept of precancerous lesions and cancer, and those relating to the early diagnosis. Despite the numerous described methods of screening, biopsy remains the most useful test, and therefore it is essential, mainly if we consider the new possibilities of molecular studies. ß 2014 Elsevier Espan˜a, S.L.U. All rights reserved.

Introduccio´n El ca´ncer de cabeza y cuello representa el 5% de todas las neoplasias del organismo y el 2% de la cavidad oral1. La mortalidad ˜ os es del 50%, de ahı´ la importancia del diagno´stico global a los 5 an precoz. Es relevante el incremento de la prevalencia en individuos ˜ os2. Los profesionales de la salud oral son los menores de 40 an responsables del diagno´stico precoz de las lesiones que puedan malignizar y del ca´ncer oral en sus estadios ma´s iniciales. Hay varios factores etiolo´gicos implicados: el tabaco (fumado o mascado), el consumo de alcohol, la dieta, la inmunosupresio´n,

* Autor para correspondencia. Correo electro´nico: [email protected] (E. Jane´-Salas).

virus como el del papiloma humano (VPH), la presencia de lesiones premalignas y, en discusio´n para algunos autores, los factores trauma´ticos locales3. Desde 1978 la OMS define el concepto de lesiones y condiciones orales premalignas4. La lesio´n precancerosa es una alteracio´n morfolo´gica del tejido en la que el ca´ncer oral tiene un mayor riesgo de producirse. La situacio´n precancerosa es un estado generalizado asociado con un riesgo aumentado de padecer ca´ncer oral. Esta terminologı´a esta´ en ˜ o 2007, Warnakulasuriya et al.5 introducen el revisio´n, y en el an nombre de lesiones potencialmente malignas, que pese a no gozar de un completo consenso, se va imponiendo a la anterior clasificacio´n. Estos autores las definen como lesiones potencialmente malignas (lesiones con riesgo de desarrollar tumores malignos en mayor proporcio´n que el tejido adyacente de aspecto normal)5.

http://dx.doi.org/10.1016/j.medcli.2014.11.014 ˜ a, S.L.U. Todos los derechos reservados. 0025-7753/ß 2014 Elsevier Espan

Co´mo citar este artı´culo: Lo´pez-Lo´pez J, et al. Preca´ncer y ca´ncer bucal. Med Clin (Barc). 2015. http://dx.doi.org/10.1016/ j.medcli.2014.11.014

G Model

MEDCLI-3182; No. of Pages 5 J. Lo´pez-Lo´pez et al / Med Clin (Barc). 2015;xx(x):xxx–xxx

2

En el presente trabajo revisamos lo publicado sobre estas entidades y su diagno´stico, con el fin de resaltar el papel del profesional de la salud en su reconocimiento y diagno´stico precoz. Para ello realizamos una bu´squeda bibliogra´fica en PubMed con las palabras clave: premalignant oral lesions prevention. Tambie´n se buscan los ensayos clı´nicos desde enero de 2011 hasta la actualidad con las palabras clave: oral cancer prevention AND dentistry.

Tabla 1 Lesiones potencialmente malignas en la cavidad oral Leucoplasia Eritroplasia Lesiones palatinas en pacientes fumadores inversos Fibrosis de la submucosa oral Queratosis actı´nica Liquen plano Lupus eritematoso discoide Fuente: Warnakulasuriya et al.5

Discusio´n ˜ os, De los 373 trabajos encontrados, 139 en los u´ltimos 10 an 61 se descartan al leer el tı´tulo, 2 porque se refieren al VIH-sida y uno por ser un trabajo sobre la capacidad inhibitoria de la angioge´nesis de la talidomida en un modelo animal de 70 ha´msteres. De los restantes, 9 corresponden a otras entidades, 17 son opiniones personales o se refieren a aspectos concretos del ca´ncer oral, 39 de ellos son revisiones (8 revisiones sistema´ticas), uno es un metaana´lisis, y otro, un ensayo clı´nico controlado en humanos. ˜ os anteriores, Se analizan tambie´n otros 2 ensayos clı´nicos de an ambos de 1998 y del grupo de la Universidad de Helsinki6,7. De los 12 ensayos clı´nicos controlados recientes encontrados, uno coincide con la bu´squeda anterior6. De los otros 11, una vez leı´do el texto completo, 6 se refieren a trabajos sobre el tratamiento del ca´ncer ya establecido6–11. Otro incide en la importancia de la tincio´n de lugol en la evaluacio´n de los estadios I y II del ca´ncer de lengua12. Atalay et al. analizan la posible utilidad de los bifosfonatos13, Pai y Prasad estudian los efectos del tabaco en los niveles de mono´xido de carbono14, Lopes et al. tratan sobre la conveniencia o no de profilaxis antibio´tica15, y tan solo uno es un ensayo clı´nico16. Es un trabajo realizado en Arabia Saudı´ que analiza el conocimiento que los estudiantes, los asistentes dentales, los odonto´logos generales y los especialistas tienen sobre la cuestio´n del preca´ncer. Los autores16 concluyen que entre el 41,2 y el 63,4% son competentes para llevar a cabo un correcto examen de la cavidad bucal y palpar los ganglios linfa´ticos, aumentando la competencia cuanto mayor es el nivel de instruccio´n, la experiencia y el acceso a estudios de formacio´n continua. Un 82% son partidarios de remitir las lesiones sospechosas. Sobre este mismo aspecto incide el trabajo de Uti y Fashina17, de la primera bu´squeda. En ese trabajo se comenta el escaso conocimiento de la clı´nica de las lesiones precancerosas que tienen los estudiantes de Odontologı´a de la clı´nica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Lagos, Nigeria. Destacarı´amos, igualmente, un trabajo sobre quimioterapia18, otro sobre radioterapia de intensidad modulada19, otro sobre crioterapia20 y un u´ltimo sobre te´cnicas de restauracio´n dental21. Consideraremos 3 aspectos para analizar los datos ma´s relevantes: preca´ncer oral, ca´ncer oral y me´todos de diagno´stico precoz del ca´ncer bucal. Preca´ncer Adema´s de los factores exo´genos que pueden estimular la transformacio´n displa´sica, hay una serie de factores endo´genos implicados, son las diferentes lesiones potencialmente malignas (tabla 1). Dentro de ellas repasaremos la leucoplasia, la eritroplasia y el liquen plano (LP)5. Leucoplasia Es la lesio´n precancerosa ma´s frecuente de la mucosa bucal; se define como una lesio´n predominantemente blanca, que no se desprende al raspado y que clı´nica e histolo´gicamente no corresponde a ninguna otra entidad4. Desde los criterios establecidos en 200222, se propone un diagno´stico provisional, luego eliminar los posibles factores etiolo´gicos durante 2-4 semanas

(tiempo insuficiente si la etiologı´a es el tabaco) y, si no desaparece, confirmarla histolo´gicamente. Hoy se acepta una menor incidencia ˜ os. Ası´, el trabajo de Scheifele et al.23, en 16.128 que hace unos an individuos, refiere una prevalencia del 0,66% en varones y del 0,21% en mujeres. Las localizaciones ma´s frecuentes fueron la mucosa yugal y la lengua. Tambie´n refiere porcentajes bajos para la leucoplasia (1,01%) y para el LP (1,02%) el trabajo, realizado en ˜ os, de Carrard et al.24, en el que destaca 1.586 sujetos brasilen especialmente su posible relacio´n con algunos virus. Recordemos, por otro lado, que desde el punto de vista clı´nico se utiliza la clasificacio´n de la Conferencia de Uppsala de 199425 (tabla 2). Si nos centramos en su posible malignizacio´n, Pindborg, en 196826, refiere cifras entre el 0,1 y el 17%. Por el contrario, Scheifele et al., en ˜ alan que la transformacio´n maligna anual es inferior al 200323, sen 1%, siendo las de ma´s riesgo las localizadas en el suelo de la boca, las no homoge´neas, las displasias y las que presentan determinados marcadores moleculares (destacando la p53, pe´rdida de heterocigosidad, contenido en ADN y clasificacio´n de regiones del organizador nucleolar afines a Ag «AgNOR»). Finalmente, en cuanto al tratamiento se recomienda eliminar, si existen, los factores etiolo´gicos, y realizar exe´resis de la lesio´n, si es posible. Se han ensayado tratamientos farmacolo´gicos con vitamina A, calcipotriol, a´cido retinoico, betacarotenos, bleomicina, curcumina, etc., con resultados no concluyentes26,27. Eritroplasia La eritroplasia y su forma mixta ma´s frecuente, la eritroleucoplasia, entran dentro del concepto de lesiones rojas de la cavidad bucal, y como tales merecen un especial diagno´stico, pues en ocasiones estamos frente a un carcinoma in situ. Estas lesiones deben ser biopsiadas siempre, e incluso algunos autores recomiendan que la biopsia se realice en servicios de cirugı´a oncolo´gica de cabeza y cuello, ya que el resultado suele ser de malignidad. En su etiopatogenia se barajan los agentes etiolo´gicos comunes con la leucoplasia28. Clı´nicamente es una mancha roja, generalmente

Tabla 2 Clasificacio´n clı´nica de las leucoplasias tomando como base los criterios establecidos en la Conferencia de Uppsala Clasificacio´n: aspecto Homoge´nea Lesio´n predominantemente blanca y uniforme, de consistencia firme, poco espesor, de superficie lisa o arrugada, que en ocasiones presenta surcos poco profundos No homoge´nea Lesio´n predominantemente blanca, que puede alternar con otras zonas rojas y/o una superficie irregular, nodular o exofı´tica Eritroleucoplasia: a´reas blancas y rojas mezcladas Leucoplasia nodular: excrecencias rojas y/o blancas redondeadas Leucoplasia exofı´tica: antes se denominaba verrugosa. Crece en volumen hacia el exterior con proyecciones redondeadas o puntiagudas Clasificacio´n: etiologı´a Leucoplasia verdadera. No hay factores asociados, excepto el tabaco Leucoplasia idiopa´tica. No hay factores asociados Leucoplasia secundaria. Se detecta un factor causal Fuente: Axe´ll et al.25

Co´mo citar este artı´culo: Lo´pez-Lo´pez J, et al. Preca´ncer y ca´ncer bucal. Med Clin (Barc). 2015. http://dx.doi.org/10.1016/ j.medcli.2014.11.014

G Model

MEDCLI-3182; No. of Pages 5 J. Lo´pez-Lo´pez et al / Med Clin (Barc). 2015;xx(x):xxx–xxx

asintoma´tica, que no puede ser diagnosticada como ninguna otra lesio´n definible25. Suele localizarse en el paladar blando, suelo de la boca y mucosa yugal. La proporcio´n varo´n:mujer es de 1:1 y es ma´s frecuente en pacientes asia´ticos28. Su tasa de malignizacio´n es mayor que la de la leucopasia29. Reichart y Philipsen28, por ejemplo, citan que en las formas homoge´neas, el 51% son carcinomas invasivos, el 41% carcinomas in situ, y el 9% restante son displasias leves o moderadas. Se desconoce el factor que potencia la evolucio´n hacia la malignidad, pero se ha considerado, entre otros, la infeccio´n cro´nica por Candida albicans o por el VPH28,30. Su tratamiento es la extirpacio´n de la lesio´n y el estudio histopatolo´gico completo, pero hay algunos trabajos prometedores con terapia fotodina´mica, tanto para esta entidad como para la leucoplasia verrugosa proliferativa31. En el caso de que las lesiones sean muy extensas, puede ser conveniente utilizar alguna te´cnica diagno´stica complementaria, y es fundamental convencer al paciente para que abandone los ha´bitos to´xicos asociados32. Liquen plano Es una enfermedad mucocuta´nea inflamatoria cro´nica, con gran variedad de manifestaciones clı´nicas, de etiologı´a desconocida y con manifestaciones orales frecuentes33. Algunos investigadores muestran una prevalencia del 0,1 al 4%, y la mayorı´a de los ˜ os y en perı´odo pacientes son mujeres mayores de 50 an posmenopa´usico. La clasificacio´n clı´nica ma´s sencilla consiste en 3 formas, denominadas liquen plano oral (LPO) reticular (blanco), LPO atro´fico-erosivo (rojo), y la combinacio´n de ambos; la reticular es la forma ma´s frecuente34. El LPO atro´fico-erosivo aparece principalmente en la lengua, la mucosa yugal y la encı´a. Las formas reticulares suelen ser sime´tricas, asintoma´ticas y presentarse en la mucosa yugal. Y si bien la etiologı´a es desconocida, hoy en dı´a se acepta que factores gene´ticos (relaciones familiares de HLA), hormonales (diferencias entre mujeres y varones) y ambientales (virus, fa´rmacos, estre´s y otros deso´rdenes) desencadenan una alteracio´n inmunolo´gica que afecta las ce´lulas basales del epitelio, siendo el infiltrado de´rmico una manifestacio´n secundaria. Su relacio´n etiolo´gica con diferentes virus o con Helicobacter pylori no es concluyente35. Entre los factores desencadenantes tiene un papel relevante el factor psicolo´gico, y su asociacio´n con enfermedades siste´micas como la hepatitis C, la diabetes o la hipertensio´n es discutida36. Es importante realizar controles perio´dicos, ya que tiene potencial de malignidad34,37. Tambie´n es primordial recordar que hay una serie de lesiones difı´ciles de distinguir de las manifestaciones clı´nicas del LPO: son las denominadas reacciones liquenoides. Hay reacciones liquenoides orales por contacto (reacciones ale´rgicas por contacto, debido a hipersensibilidad retardada, y el material ma´s frecuentemente implicado es la amalgama), reacciones liquenoides por fa´rmacos y reacciones liquenoides en la reaccio´n de injerto contra hue´sped38. Las lesiones cuta´neas de LP pueden manifestarse como pa´pulas de 24 mm de dia´metro, de forma poligonal, y aparecen de forma aislada, o agrupadas formando placas bien diferenciadas. Suelen ser rosadas, virando luego hacia un rojo viola´ceo o pardo. Al igual que las lesiones orales, en su superficie se localizan estrı´as blancas (estrı´as de Wickham), y al desaparecer puede quedar una pigmentacio´n mela´nica. En un 80% de los casos son pruriginosas y su localizacio´n ma´s frecuente es en las zonas flexoras, en especial ˜ eca; las capilares pueden presentarse en la cara anterior de la mun como placas alope´cicas33,34. La clı´nica es fundamental para el diagno´stico, pero se debe realizar una biopsia que lo confirme y permita descartar posible displasia o malignidad38. En la membrana basal la inmunofluorescencia directa puede ser positiva (de manera no especı´fica) para fibrino´geno y en menor medida para IgM. Las formas blancas pueden desaparecer esponta´neamente, pero las formas rojas

3

Tabla 3 Criterios de malignidad del liquen plano oral AHace falta un diagno´stico clı´nico de LPO y una histopatologı´a en la que al menos existan 2 de los siguientes criterios Hiperqueratosis o paraqueratosis Crestas intraepiteliales en forma de sierra Degeneracio´n hidro´pica de la capa basal Infiltrado en banda subepitelial BHistoria y seguimiento Los datos clı´nicos y anatomopatolo´gicos que indiquen la transformacio´n deben estar debidamente documentados (tanto en las lesiones previas como cuando se haya producido la degeneracio´n) Debe tenerse el registro de los datos clı´nicos del paciente (edad, sexo, localizacio´n de las lesiones) ˜ os Debe haber un seguimiento de al menos 2 an CNo debe haber exposicio´n al tabaco (en aquellos pacientes que presenten un carcinoma y que tengan tabaquismo, debe considerarse el tabaco como potencialmente responsable de la malignizacio´n) Adaptada de Van der Meij et al.41

raramente lo hacen. Las formas orales se consideran ma´s cro´nicas que las cuta´neas, y ma´s difı´ciles de tratar. Como regla general se puede decir que las formas blancas no precisan tratamiento y que las formas atro´fico-erosivas, que habitualmente producen sı´ntomas, se tratan con glucocorticoides to´picos y, en algunas ocasiones, con corticoides siste´micos u otras alternativas39,40. Los criterios para establecer su posible evolucio´n a malignidad fueron ya establecidos en 199941 (tabla 3). Ca´ncer oral Los factores etiolo´gicos del ca´ncer oral no difieren de los considerados para las lesiones premalignas, y algunos trabajos recientes discuten el posible valor de la irritacio´n cro´nica de las pro´tesis, al menos en el ca´ncer de lengua42. En el 95% de los casos el ca´ncer oral es un carcinoma escamoso, y la presentacio´n clı´nica ma´s frecuente es una lesio´n ulcerovegetante infiltrativa, de bordes redondos y elevados, contorno irregular, superficie rugosa, base indurada a la palpacio´n y con tendencia al sangrado esponta´neo o al roce. En estadios iniciales se presenta habitual˜ a u´lcera, acompan ˜ ada en ocasiones de mente como una pequen a´reas blancas, pero no hemos de olvidar que puede tener otras formas de presentacio´n, como la verrucoide o la proliferativa. El carcinoma escamoso presenta una tendencia a la progresio´n regional (generalmente al cuello) por medio del torrente linfa´tico, pero ocasionalmente puede diseminarse a distancia, siendo el pulmo´n y el hı´gado los o´rganos ma´s frecuentemente ˜ os3, y vendra´ afectados. Su prono´stico es del 50% a los 5 an determinado por el estado general del paciente, el tipo y grado de diferenciacio´n histolo´gica, y de manera muy especial por el estadio clı´nico en el momento del diagno´stico (TNM). En lo referente al tratamiento, es abundante la literatura me´dica que refiere que debe ser multidisciplinar, participando diferentes especialistas (onco´logos me´dicos, cirujanos orales y maxilofaciales, radioterapeutas, quimioterapeutas, odonto´logos, psico´logos y nutricionistas)11–15. No acabaremos este apartado sin hacer una reflexio´n sobre cua´l deberı´a ser la actitud de los profesionales de la salud, preferentemente odonto´logo y me´dicos de atencio´n primaria, ante esta enfermedad (tabla 4)38,39,42. Es prioritaria la exploracio´n oral sistema´tica a partir del conocimiento de todas las alteraciones potencialmente malignas, que permita un diagno´stico precoz que, unido a tener una boca en el mejor estado de salud posible antes del tratamiento42,43, condicionara´ un mejor prono´stico (hasta el ˜ os)42 y menores complicaciones 80% de supervivencia a los 5 an postratamiento.

Co´mo citar este artı´culo: Lo´pez-Lo´pez J, et al. Preca´ncer y ca´ncer bucal. Med Clin (Barc). 2015. http://dx.doi.org/10.1016/ j.medcli.2014.11.014

G Model

MEDCLI-3182; No. of Pages 5 J. Lo´pez-Lo´pez et al / Med Clin (Barc). 2015;xx(x):xxx–xxx

4 Tabla 4 Actitud del odonto´logo frente al ca´ncer oral

Debe dirigirse a: La prevencio´n de la enfermedad (reconocer y controlar lesiones precancerosas, eliminar irritantes locales cro´nicos, etc.) El diagno´stico precoz (mediante la exploracio´n oral en las visitas perio´dicas odontolo´gicas) La informacio´n adecuada al paciente (en materias de prevencio´n de la enfermedad y de la propia enfermedad) La redireccio´n del paciente oncolo´gico a unidades de tratamiento de dicha enfermedad, y La realizacio´n de un tratamiento odontolo´gico preventivo en pacientes que recibira´n un tratamiento oncolo´gico Adaptada de Al-Hashimi et al.38, Bagan et al.39 y Albuquerque et al.42

Diagno´stico precoz de las lesiones precancerosas El diagno´stico de certeza de cualquier lesio´n sospechosa en la cavidad oral debe realizarse mediante una biopsia. El grado de displasia se considera un buen predictor de progresio´n44. Dicho esto, en la actualidad existen una serie de te´cnicas que permiten optimizar el diagno´stico y, en algunos casos, en poblaciones susceptibles y muy numerosas, pueden utilizarse como te´cnicas de cribado. Describimos a continuacio´n los aspectos ma´s relevantes de las mismas: a) Colorantes vitales. La utilizacio´n de pigmentos que tienen tendencia a fijarse en los nu´cleos de las ce´lulas con alta tasa de reproduccio´n permite localizar las zonas mejores para realizar la biopsia, mejorando ası´ su sensibilidad y especificidad. Se utiliza azul de toluidina, azul de metileno, lugol y rosa de Bengala. Investigaciones recientes45 les confieren una tasa de sensibilidad cercana al 95% y una especificidad del 65 al 90%. Algu´n estudio propone el a´cido ace´tico al 10%, que provoca una quelacio´n de las proteı´nas de superficie del epitelio, y permite optimizar el nivel de diagno´stico visual. b) Te´cnicas o´pticas. Basa´ndose en las te´cnicas de iluminacio´n selectiva de la mucosa del cuello uterino que se usa en Ginecologı´a (colposcopia), se han ideado diferentes te´cnicas para la exploracio´n oral con el fin de realizar un diagno´stico precoz46–48. Se utilizan te´cnicas de autofluorescencia (VELscope1), me´todo que se asocia a los cambios en la estructura y el metabolismo del epitelio, ası´ como en el estroma subepitelial, resultados que se observan a partir de su interaccio´n con la luz de una determinada longitud de onda47,48. Lo´pez-Jornet y de la Mano-Espinosa49 les confieren una sensibilidad y especificidad por encima del 98 y 94%, respectivamente. Otra te´cnica es la de autoquimiofluorescencia (ViziLite Plus1)50, en la que se utiliza el a´cido ace´tico como quelante de las proteı´nas de superficie, y la emisio´n de luz polarizada de agitacio´n responde con la disminucio´n de la fluorescencia en la zona afectada. Estas 2 te´cnicas tienen el inconveniente de crear falsas expectativas en los profesionales47. Tambie´n se utilizan el Orascoptic1 51 y el MicroLux1 52. La sensibilidad y la especificidad de estas te´cnicas son muy variables, dependiendo de los estudios y de la experiencia de los profesionales que las utilizan. En ningu´n caso pueden ser utilizadas como u´nica te´cnica de diagno´stico precoz. Una utilidad preconizada, actualmente en estudio, para estos procedimientos, es el ana´lisis de los ma´rgenes quiru´rgicos. Ana´lisis sobre diferentes me´todos combinados son referenciados en los trabajos de Patton et al.51, Sambandham et al.53 y de Huber54. c) Te´cnicas citolo´gicas. Se basan en la efectividad demostrada con la te´cnica de Papanicolaou en la citologı´a ginecolo´gica de la triple toma. A nivel bucal esta´ poco sistematizada, y como te´cnica de cribado deberı´a permitir recoger un mı´nimo de 5 muestras en

cada procedimiento, y en el caso de la citologı´a oral, cada muestra requiere un nuevo kit. Esto hace que sea poco pra´ctica y muy costosa. Puede ser de cierta utilidad en el seguimiento de lesiones diagnosticadas o zonas tratadas por una lesio´n previa. Pueden, adema´s, asociarse a te´cnicas de bu´squeda de alteraciones gene´ticas moleculares o cromoso´micas. La te´cnica ma´s extendida es el OralCDx1 55. Trullenque-Eriksson et al.46 analizan la sensibilidad y la especificidad de este y otros me´todos anteriormente comentados, otorga´ndole una sensibilidad del 71-100% y una especificidad del 32-100%. Ma´s recientemente, Reboiras-Lo´pez et al.56 le confieren un nuevo valor al unirlo a las modernas te´cnicas de deteccio´n de ARN. En concordancia con estos u´ltimos autores, las investigaciones actuales buscan marcadores moleculares especı´ficos a nivel de los tejidos (biopsia) o de las ce´lulas (citologı´a). No obstante, lo que supondrı´a un cambio radical en el prono´stico de esta entidad serı´a la obtencio´n de marcadores de la saliva del paciente, investigacio´n que se esta´ desarrollando de forma cada vez ma´s creciente57. Ası´, estudios recientes como el de Jancsik et al.58 aseguran que en ana´lisis de saliva se han encontrado sobreexpresiones proteicas de anexina A8 y peroxideroxina-2, que han sido descritas previamente en muestras de ca´ncer oral, por lo que es posible que la saliva pueda ser usada como me´todo de deteccio´n de ca´ncer oral en etapas tempranas; si bien los resultados son esperanzadores, esta´n lejos de la efectividad necesaria59.

Conclusiones Finalmente podemos decir que el mejor me´todo de diagno´stico se inicia con una cuidadosa y sistema´tica revisio´n de la cavidad oral, y ante la sospecha de una lesio´n, se debe realizar una biopsia. La histopatologı´a permite valorar la lesio´n, su grado de alteracio´n y su posible tendencia a la malignizacio´n. Por otro lado, si bien existen comercializadas una serie de te´cnicas coadyuvantes, que permiten optimizar el diagno´stico, en especial en poblaciones susceptibles, solo debemos considerarlas como te´cnicas de cribado coadyuvantes. Conflicto de intereses Los autores declaran no tener ningu´n conflicto de intereses. Bibliografı´a 1. Mehrotra R, Pandya S, Chaudhary AK, Kumar M, Singh M. Prevalence of oral pre-malignant and malignant lesions at a tertiary level hospital in Allahabad, India. Asian Pac J Cancer Prev. 2008;9:263–5. 2. Mu¨ller S, Pan Y, Li R, Chi AC. Changing trends in oral squamous cell carcinoma with particular reference to young patients: 1971-2006. The Emory University experience. Head Neck Pathol. 2008;2:60–6. 3. Albuquerque R, Lo´pez-Lo´pez J, Marı´-Roig A, Jane´-Salas E, Chimenos-Ku¨stner E, Santos JR. Relationship between squamous cell carcinoma of the anterior two thirds of the tongue and removable denture use: A pioneer study in a Portuguese population. Braz Dent J. 2011;22:410–4. 4. Van der Waal I. Potentially malignant disorders of the oral and oropharyngeal mucosa; terminology, classification and present concepts of management. Oral Oncol. 2009;45:317–23. 5. Warnakulasuriya S, Johnson NW, van der Waal I. Nomenclature and classification of potentially malignant disorders of the oral mucosa. J Oral Pathol Med. 2007;36:575–80. 6. Siar CH, Mah MC, Gill PP. Prevalence of bilateral ‘mirror-image’ lesions in patients with oral potentially malignant epithelial lesions. Eur Arch Otorhinolaryngol. 2012;269:999–1004. 7. Liede KE, Alfthan G, Hietanen JH, Haukka JK, Saxen LM, Heinonen OP. Betacarotene concentration in buccal mucosal cells with and without dysplastic oral leukoplakia after long-term beta-carotene supplementation in male smokers. Eur J Clin Nutr. 1998;52:872–6. 8. Liede K, Hietanen J, Saxen L, Haukka J, Timonen T, Ha¨yrinen-Immonen R, et al. Long-term supplementation with alpha-tocopherol and beta-carotene and prevalence of oral mucosal lesions in smokers. Oral Dis. 1998;4:78–83.

Co´mo citar este artı´culo: Lo´pez-Lo´pez J, et al. Preca´ncer y ca´ncer bucal. Med Clin (Barc). 2015. http://dx.doi.org/10.1016/ j.medcli.2014.11.014

G Model

MEDCLI-3182; No. of Pages 5 J. Lo´pez-Lo´pez et al / Med Clin (Barc). 2015;xx(x):xxx–xxx 9. Smee RI, Broadley K, Bridger GP, Williams J. Floor of mouth carcinoma: Surgery still the dominant mode of treatment. J Med Imaging Radiat Oncol. 2012;56:338–46. 10. Voet PW, Dirkx ML, Breedveld S, Fransen D, Levendag PC, Heijmen BJ. Toward fully automated multicriterial plan generation: A prospective clinical study. Int J Radiat Oncol Biol Phys. 2013;85:866–72. 11. Wang ZH, Zhang SZ, Zhang ZY, Zhang CP, Hu HS, Tu WY, et al. Protecting the oral mucosa in patients with oral tongue squamous cell carcinoma treated postoperatively with intensity-modulated radiotherapy: A randomized study. Laryngoscope. 2012;122:291–8. 12. Umeda M, Shigeta T, Takahashi H, Minamikawa T, Komatsubara H, Oguni A, et al. Clinical evaluation of Lugol’s iodine staining in the treatment of stage I-II squamous cell carcinoma of the tongue. Int J Oral Maxillofac Surg. 2011;40:593–6. 13. Atalay B, Yalcin S, Emes Y, Aktas I, Aybar B, Issever H, et al. Bisphosphonaterelated osteonecrosis: Laser-assisted surgical treatment or conventional surgery. Lasers Med Sci. 2011;26:815–22. 14. Pai A, Prasad S. Attempting tobacco cessation–An oral physician’s perspective. Asian Pac J Cancer Prev. 2012;13:4973–7. 15. Lopes DR, Peres MP, Levin AS. Randomized study of surgical prophylaxis in immunocompromised hosts. J Dent Res. 2011;90:225–9. 16. Jaber L, Shaban S, Hariri D, Smith S. Perceptions of healthcare practitioners in Saudi Arabia regarding their training in oral cancer prevention, and early detection. Int J Health Care Qual Assur. 2011;24:8–18. 17. Uti OG, Fashina AA. Oral cancer education in dental schools: Knowledge and experience of Nigerian undergraduate students. J Dent Educ. 2006;70:676–80. 18. Carnaby-Mann G, Crary MA, Schmalfuss I, Amdur R. ‘‘Pharyngocise’’: Randomized controlled trial of preventative exercises to maintain muscle structure and swallowing function during head-and-neck chemoradiotherapy. Int J Radiat Oncol Biol Phys. 2012;83:210–9. 19. Studer G, Glanzmann C, Studer SP, Gra¨tz KW, Bredell M, Locher M, et al. Riskadapted dental care prior to intensity-modulated radiotherapy (IMRT). Schweiz Monatsschr Zahnmed. 2011;121:216–29. 20. Ribeiro AS, de Aguiar MC, do Carmo MA, de Abreu MH, Silva TA, Mesquita RA. 660 AsGaAl laser to alleviate pain caused by cryosurgical treatment of oral leukoplakia: A preliminary study. Photomed Laser Surg. 2011;29:345–50. 21. De Moor RJ, Stassen IG, van’t Veldt Y, Torbeyns D, Hommez GM. Two-year clinical performance of glass ionomer and resin composite restorations in xerostomic head- and neck-irradiated cancer patients. Clin Oral Investig. 2011;15:31–8. 22. Van der Waal I, Axe´ll T. Oral leukoplakia: A proposal for uniform reporting. Oral Oncol. 2002;38:521–6. 23. Scheifele C, Reichart PA, Dietrich T. Low prevalence of oral leukoplakia in a representative sample of the US population. Oral Oncol. 2003;39:619–25. 24. Carrard V, Haas A, Rados P, Filho M, Oppermann R, Albandar J, et al. Prevalence and risk indicators of oral mucosal lesions in an urban population from South Brazil. Oral Dis. 2011;17:171–9. 25. Axe´ll T, Pindborg JJ, Smith CJ, van der Waal I. Oral white lesions with special reference to precancerous and tobacco-related lesions: Conclusions of an international symposium held in Uppsala, Sweden, May 18-21 1994. International Collaborative Group on Oral White Lesions. J Oral Pathol Med. 1996;25: 49–54. 26. Pindborg JJ. Conference on epidemiology of oral cancer and precancerous lesions. Report of proceedings. Int Dent J. 1968;18:626–30. 27. Nagao UT, Warnakulasuriya S, Nakamara T, Kato S, Yamamoto J, Fukano H, et al. Tretment of oral leukoplakia with a iodure of beta-carotene and vitamin C supplements: A randomized controlled trial. Int J Cancer. 2014, http:// dx.doi.org/10.1002/ijc.29156 28. Reichart PA, Philipsen HP. Oral erythroplakia - A review. Oral Oncol. 2005;41: 551–61. 29. Van der Waal I. Oral potentially malignant disorders: Is malignant transformation predictable and preventable? Med Oral Patol Oral Cir Bucal. 2014;19: e386–90. 30. Rautava J, Syrja¨nen S. Human papillomavirus infections in the oral mucosa. J Am Dent Assoc. 2011;142:905–14. 31. Epstein JB, Gorsky M, Fischer D, Gupta A, Epstein M, Elad S. A survey of the current approaches to diagnosis and management of oral premalignant lesions. J Am Dent Assoc. 2007;138:1555–62. 32. Lin HP, Chen HM, Yu CH, Yang H, Wang YP, Chiang CP. Topical photodynamic therapy is very effective for oral verrucous hyperplasia and oral erythroleukoplakia. J Oral Pathol Med. 2010;39:624–30. 33. Gorouhi F, Davari P, Fazel N. Cutaneous and mucosal lichen planus: A comprehensive review of clinical subtypes, risk factors, diagnosis, and prognosis. ScientificWorldJournal. 2014;30:742826. 34. Otero-Rey EM, Suarez-Alen F, Pen˜amaria-Mallon M, Lopez-Lopez J, BlancoCarrion A. Malignant transformation of oral lichen planus by a chronic inflammatory process. Use of topical corticosteroids to prevent this progression? Acta Odontol Scand. 2014;72:570–7.

5

35. Pourshahidi S, Fakhri F, Ebrahimi H, Fakhraei B, Alipour A, Ghapanchi J, et al. Lack of association between Helicobacter pylori infection and oral lichen planus. Asian Pac J Cancer Prev. 2012;13:1745–7. 36. Del Olmo JA, Pascual I, Baga´n JV, Serra MA, Escudero A, Rodriguez F, et al. Prevalence of hepatitis C virus in patients with lichen planus of the oral cavity and chronic liver disease. Eur J Oral Sci. 2000;108:378–82. 37. Petti PF, Baga´n JV, Scully C, Chaparro N. Malignant turn of oral planus in three new cases. Acta Otorrinolaringol Esp. 2004;55:41–4 [Spanish]. 38. Al-Hashimi I, Schifter M, Lockhart PB, Wray D, Brennan M, Migliorati CA, et al. Oral lichen planus and oral lichenoid lesions: Diagnostic and therapeutic considerations. Oral Surg Oral Med Oral Pathol Oral Radiol Endod. 2007;103 Suppl 25:e1–2. 39. Bagan J, Compilato D, Paderni C, Campisi G, Panzarella V, Picciotti M, et al. Topical therapies for oral lichen planus management and their efficacy: A narrative review. Curr Pharm Des. 2012;18:5470–80. 40. Lo´pez Lo´pez J, Rosello´ Llabre´s X. Cyclosporine A, an alternative to the oral lichen planus erosive treatment. Bull Group Int Rech Sci Stomatol Odontol. 1995;38: 33–8. 41. Van der Meij EH, Mast H, van der Waal I. The possible premalignant character of oral lichen planus and oral lichenoid lesions: A prospective five-year follow-up study of 192 patients. Oral Oncol. 2007;43:742–8. 42. Albuquerque R, Lo´pez-Lo´pez J, Marı´-Roig A, Jane´-Salas E, Rosello´-Llabre´s X, Santos JR. Oral tongue squamous cell carcinoma (OTSCC): Alcohol and tobacco consumption versus non-consumption. A study in a Portuguese population. Braz Dent J. 2011;22:517–21. 43. Ray-Chaudhuri A, Shah K, Porter RJ. The oral management of patients who have received radiotherapy to the head and neck region. Br Dent J. 2013;214: 387–93. 44. Dionne KR, Warnakulasuriya S, Zain BR, Cheong SC. Potentially malignant disorders of the oral cavity: Current practice and future directions in the clinic and laboratory. Int J Cancer. 2015;136:503–15. doi:10.1002/ijc.28754. 45. Awan KH, Yang Y, Morgan P, Warnakulasuriya S. Utility of toluidine blue as a diagnostic adjunct in the detection of potentially malignant disorders of the oral cavity–A clinical and histological assessment. Oral Dis. 2012;18:728–33. ˜ oz-Corcuera M, Campo-Trapero J, Cano-Sa´nchez J, 46. Trullenque-Eriksson A, Mun Bascones-Martı´nez A. Analysis of new diagnostic methods in suspicious lesions of the oral mucosa. Med Oral Patol Oral CirBucal. 2009;14:E210–6. 47. Mehrotra R, Singh M, Thomas S, Nair P, Pandya S, Nigam NS, et al. A crosssectional study evaluating chemiluminescence and autofluorescence in the detection of clinically innocuous precancerous and cancerous oral lesions. J Am Dent Assoc. 2010;141:151–6. 48. Williams PM, Poh CF, Hovan AJ, Ng S, Rosin MP. Evaluation of a suspicious oral mucosal lesion. J Can Dent Assoc. 2008;74:275–80. 49. Lo´pez-Jornet P, de la Mano-Espinosa T. The efficacy of direct tissue fluorescence visualization in screening for oral premalignant lesions in general practice: An update. Int J Dent Hyg. 2011;9:97–100. 50. Awan KH, Morgan PR, Warnakulasuriya S. Utility of chemiluminescence (ViziLiteTM) in the detection of oral potentially malignant disorders and benign keratoses. J Oral Pathol Med. 2011;40:541–4. 51. Patton LL, Epstein JB, Kerr AR. Adjunctive techniques for oral cancer examination and lesion diagnosis: A systematic review of the literature. J Am Dent Assoc. 2008;139:896–905. 52. McIntosh L, McCullough MJ, Farah CS. The assessment of diffused light illumination and acetic acid rinse (Microlux/DL) in the visualisation of oral mucosal lesions. Oral Oncol. 2009;45:e227–31. 53. Sambandham T, Masthan KM, Kumar MS, Jha A. The application of vizilite in oral cancer. J Clin Diagn Res. 2013;7:185–6. 54. Huber MA. Adjunctive diagnostic aids in oral cancer screening: An update. Tex Dent J. 2012;129:471–80. 55. Kosicki DM, Riva C, Pajarola GF, Burkhardt A, Gra¨tz KW. OralCDx brush biopsy– A tool for early diagnosis of oral squamous cell carcinoma. Schweiz Monatsschr Zahnmed. 2007;117:222–7 [German]. 56. Reboiras-Lo´pez MD, Pe´rez-Saya´ns M, Somoza-Martı´n JM, Gayoso-Diz P, Barros-Angueira F, Ga´ndara-Rey JM, et al. Comparison of the Cytobrush1, dermatological curette and oral CDx1 brush test as methods for obtaining samples of RNA for molecular analysis of oral cytology. Cytopathology. 2012;23:192–7. 57. Rajkumari S, Sathiyajeeva J, Kumar CS, Sunil PM, Thayumanavan B. Molecular predictors in the early diagnosis of oral cancer. J Clin Diagn Res. 2013;7: 942–4. 58. Jancsik VA, Gelencser G, Maasz G, Schmidt J, Molnar GA, Wittmann I, et al. Salivary proteomic analysis of diabetic patients for possible oral squamous cell carcinoma biomarkers. Pathol Oncol Res. 2014;20:591–5. 59. Lin HP, Wang YP, Chiang CP. Expression of p53, MDM2, p21, heat shock protein 70, and HPV 16/18 E6 proteins in oral verrucous carcinoma and oral verrucous hyperplasia. Head Neck. 2011;33:334–40.

Co´mo citar este artı´culo: Lo´pez-Lo´pez J, et al. Preca´ncer y ca´ncer bucal. Med Clin (Barc). 2015. http://dx.doi.org/10.1016/ j.medcli.2014.11.014

[Oral precancer and cancer].

We reviewed the concept of oral precancerous lesions, oral cancer, and the possibility of early diagnosis. With the keywords: premalignant oral lesion...
341KB Sizes 1 Downloads 29 Views